No sé si antes había comentado que una de mis debilidades es el tango. Adoro escuchar tango, verlo bailar, e hice el intento de ir a clases, pero la falta de un compañero de baile adecuado agüó mis intenciones.
Anoche fui con mi madre a ver un Show de tango, con baile, músico en vivo y cantantes. Una maravilla, dos horas gozando de ésta música celestial y apasionada.
A Buenos Aires he ido dos veces y cada una de esas veces he asistido a shows de tango que me dejan con la boca abierta... anoche sentí nostalgia de esa ciudad y su magia, el tango evoca en mí sólo buenos momentos y pasión por el baile y la música. Amo el tango y todos sus derivados.
Para partir éste lunes caluroso y trabajólico, le dejo a un maestro:
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